Catastro y Georreferenciación
Georreferenciación de parcelas y edificios
Generación ficheros Gml
Validación gráfica alternativa validada por catastro
Deslindes, replanteos y amojonamientos
Segregaciones, agregaciones o agrupaciones de parcelas
Georreferenciación de parcelas y edificios
La georreferenciación de parcelas y edificios es un proceso fundamental en la gestión y planificación urbana y rural. Consiste en asignar coordenadas geográficas precisas a parcelas de terreno y edificios, lo que permite una mejor identificación y seguimiento de la propiedad, así como la planificación y desarrollo de infraestructuras y servicios.
Para llevar a cabo la georreferenciación de parcelas y edificios, se utilizan sistemas de posicionamiento global (GPS) y tecnologías de teledetección, como imágenes satelitales y drones. Estos dispositivos permiten obtener coordenadas geográficas precisas que se vinculan a un sistema de referencia geodésico, como el Sistema de Coordenadas Universal Transversal de Mercator (UTM).
Los pasos típicos en el proceso de georreferenciación incluyen:
Adquisición de datos: Se recopilan datos topográficos, imágenes satelitales, fotografías aéreas o datos LiDAR para obtener información detallada sobre la parcela o edificio.
Identificación de puntos de control: Se seleccionan puntos de control bien definidos en el terreno que se puedan identificar claramente en las imágenes o datos recopilados.
Captura de datos GPS: Se utilizan receptores GPS de alta precisión para medir las coordenadas de los puntos de control seleccionados.
Registro de datos: Los datos de coordenadas geográficas se registran y vinculan a los puntos de control identificados.
Creación de un sistema de referencia: Los datos se transforman para ajustarse a un sistema de referencia geodésico específico, como UTM.
Georreferenciación de parcelas: Para las parcelas, se establecen vértices georreferenciados que delimitan la propiedad de manera precisa.
Georreferenciación de edificios: Se pueden utilizar coordenadas geográficas para marcar la ubicación exacta de un edificio y su relación con las parcelas circundantes.
Generación de mapas y planos: Se crean mapas y planos georreferenciados que muestran la ubicación precisa de las parcelas y edificios.
La georreferenciación es esencial para una variedad de aplicaciones, como la gestión catastral, el desarrollo urbano, la planificación de redes de servicios públicos, la agricultura de precisión y la gestión ambiental. Proporciona información valiosa para la toma de decisiones y la administración eficiente de recursos en entornos urbanos y rurales.
Generación de ficheros GML
La generación de ficheros GML se refiere a la creación de archivos en formato GML (Geography Markup Language), que es un estándar abierto utilizado para representar datos geoespaciales de manera interoperable. Estos archivos GML contienen información geográfica y espacial, como coordenadas, atributos de entidades geográficas y topología, en un formato XML (Extensible Markup Language) estructurado.
Para generar ficheros GML, se siguen los siguientes pasos:
Recopilación de datos: Reúne todos los datos geoespaciales que deseas incluir en el archivo GML. Esto puede incluir información sobre parcelas, edificios, carreteras, ríos, límites administrativos, entre otros.
Preparación de datos: Asegúrate de que los datos estén en un formato adecuado y estén georreferenciados correctamente, es decir, que tengan coordenadas espaciales asociadas.
Selección de atributos: Decide qué atributos o información adicional deseas incluir en el archivo GML. Esto puede ser información descriptiva de las entidades geográficas, como nombres, tipos, fechas, etc.
Uso de software GIS: Utiliza un software de Sistemas de Información Geográfica (SIG) que sea capaz de exportar datos a formato GML. Ejemplos de software popular incluyen ArcGIS, QGIS, GRASS GIS, entre otros.
Configuración de exportación: En el software GIS, configura la exportación a formato GML. Esto implica seleccionar las capas de datos que deseas incluir, definir el sistema de coordenadas de referencia y configurar las opciones de salida.
Ejecución de la exportación: Ejecuta el proceso de exportación. El software generará un archivo GML que contiene los datos geoespaciales y los atributos que hayas seleccionado.
Validación: Es importante validar el archivo GML generado para asegurarte de que cumple con las especificaciones del estándar GML y que no contiene errores de formato. Puedes utilizar herramientas de validación GML disponibles en línea o a través de software GIS.
Almacenamiento y distribución: Una vez que tengas el archivo GML válido, puedes almacenarlo y distribuirlo según tus necesidades. Puede ser utilizado por otros sistemas de información geoespacial o compartido en línea para su acceso público.
La generación de ficheros GML es esencial en la interoperabilidad de datos geoespaciales, ya que permite que diferentes aplicaciones y sistemas puedan compartir y utilizar información geográfica de manera coherente y estandarizada.
Validación gráfica alternativa validada por catastro
La validación gráfica alternativa validada por Catastro se refiere a un proceso mediante el cual se verifica la precisión y la consistencia de la información geográfica relacionada con parcelas y propiedades, y esta validación es respaldada y certificada por la entidad catastral competente.
El catastro es responsable de mantener registros precisos de la propiedad de la tierra y las parcelas, así como de las representaciones gráficas de estas propiedades en mapas y planos. Cuando se realiza una validación gráfica alternativa, generalmente implica lo siguiente:
Recopilación de datos existentes: Se recopilan los datos catastrales existentes, que pueden incluir mapas, planos, coordenadas geodésicas y registros de propiedad.
Generación de una representación gráfica alternativa: A menudo, los propietarios o profesionales especializados en geoinformación generan una representación gráfica alternativa de las parcelas o propiedades utilizando tecnologías como GPS, teledetección o levantamientos topográficos.
Comparación con los datos catastrales existentes: La representación gráfica alternativa se compara con los datos catastrales existentes para verificar su precisión y consistencia.
Validación por Catastro: La entidad catastral competente revisa y valida la representación gráfica alternativa. Esta validación puede implicar inspecciones en el terreno y otros controles para asegurar que la nueva representación gráfica sea precisa y cumpla con los estándares legales y técnicos establecidos.
Actualización de registros catastrales: Si la representación gráfica alternativa es validada con éxito por Catastro, se actualizan los registros catastrales para reflejar la nueva información geográfica. Esto puede incluir cambios en los límites de parcelas o propiedades.
La validación gráfica alternativa validada por Catastro es importante en situaciones en las que existen discrepancias entre los registros catastrales existentes y la realidad en el terreno. Puede ser solicitada por propietarios de tierras, profesionales de la geoinformación o autoridades locales para corregir y actualizar la información catastral.
Es fundamental seguir los procedimientos y regulaciones establecidos por la entidad catastral correspondiente, ya que los requisitos y el proceso pueden variar. Además, contar con profesionales cualificados en geoinformación y topografía es esencial para garantizar la precisión y la validez del proceso de validación gráfica alternativa.